"No llames al médico, quiero dormirme tranquilamente. Con tu mano en la mía".
Le dijo ella.
Él le recordó sobre su pasado, el día que se conocieron, cuando se dieron el primer beso ...
Y de todos esos recuerdos inolvidables que guarda un corazón enamorado
No lloraron, sonrieron viéndose a los ojos.
Muy cerca uno del otro.
No se arrepintieron, solo estaban agradecidos.
Luego ella volvió a decirle suavemente: "Te amo, para siempre".
Él le devolvió las palabras y le dio un suave beso en la frente.
"Gracias por tu amor" le susurró al oido con dulzura.
Ella cerró los ojos y se durmió pacíficamente con la mano de él en la de ella.
El besó su mano y también cerró sus ojos.
La acompaño en su sueño.
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